lunes, 31 de octubre de 2011

Vamos a comernos el mundo despacito, como si fuera un yogurt.
 Chupando la tapa, batiéndolo, comiendonoslo con cuidado, rebañando las esquinas, chupando la cuchara y metiendo el dedo antes de que nadie nos vea, cuando estas delante de la basura para deshacerte de él.
Ya está muy visto lo de comerse el mundo de un bocado.
De momento voy a comerme un mango, que lo mediterráneo está muy visto y quiero pasarme a lo exótico.


 Y cambio de opinión respecto a comerme el mundo de un bocado a comérmelo despacito, porque me gustaría comemerme ese yogurt contigo, sentada en el filo de un acantilado, con las piernas colgando y muertos de frío y no irnos hasta que no se acabara.
Y creeme, que puedo llegar a comer muy muy despacio, hasta me moriría de frío.




Paula۞

lunes, 24 de octubre de 2011

25, 10, 2011; 0:18

Te has llevado una parte de mi, de mi vida, de mi forma de ser...
Para quedarte con ella y guardarla en una cajita, una cajita como esa en la que guardo yo todas tus cartas.
Podría pasarme horas escribiendo, lo que siento cuando estoy contigo o sin ti, simplemente cuando pienso en lo que hay detrás de la palabra amistad.
Las cosas son geniales, dos cabezotas inconformistas, con verborrear, con ganas de comerse el mundo, locos por el teléfono, aficionados a las guarrerias en los recreos, una perra y un loco...
Siempre he soñado con tener un mejor amigo la verdad, de esos de los que van en serio, no de los que se tiene por decir " tengo un mejor amigo ". Y pasó así sin más llegaste como una mariposita.



¿ Como yo me amo. ?


No se de que me sorprendo, si las cajas de sorpresa del mundo están en peligro de extinción y su mayor depredador es Javier Castro Gómez.


Te amo, Ma.

jueves, 20 de octubre de 2011

Que día.

Pasado pisado, PLAS PLAS PLAS (8)

Que vidas da la vuelta, que bueno es ver a la tortilla dándose la vuelta.



Vamos a empezar un cuento...
Erasé una vez una historia de amor algo complicada, enrevesada, alejada, llena de nudos, rara... tan rara como los que la hacían, día a día.
Querían mandarse besos por el cable del teléfono, abrazos en cartas, caricias en botellas tiradas al mar, desde la playa de Madrid, noches llenas de pasión por correo certificado ...
Querían quererse sin hacerse daño, pero costaba cada día más.
En el fondo esperaban que ese sentimiento se acabara algún día, que dejaran de sentirlo, que dejaran de quererse, de desearse, de ser así, de sentirse increibles cuando estaban juntos, a kilómetros de distancia pero juntos.
No iba a haber miradas de esas que transmiten complicidad,  ni las que dicen que hay ternura, ni las que piden un beso...
No iba a haber besos, de esos de por las tardes, de los de diario, esos en los labios, que hacen mucho ruido; o esos lentos, despacio, húmedos y suaves; los que llevan a la pasión tampoco estarán, esos en los que te cuesta coger la esencia de la vida; esos en los que te rozas la punta de la nariz, mientras dibujas un corazón en su espalda para después tocar esa melena suave...
Tampoco habrá abrazos, abrazos de lado, de los que se dan cuando vas andando por la calle y hace frío o simplemente porque les apetezca estar juntos; no habrá tampoco abrazos de necesidad, los que quieres recibir cuando tienes un mal día, solo suyos; no habrá de los que se dan tumbados, en un autobús, sentados en un banco, en una silla, en el césped, en un lavabo; no estarán los que le  gustaría darle cuando quiere que deje de hablar de cosas malas si ha tenido un mal día...
No iba a haber malos días para poder hacer que se olvidara del mundo con ella  y se perdieran en cualquier lugar a cualquier hora, ¿para demostrarnos que estamos hechos el uno para el otro? No, eso está de más... no eran el uno para el otro, no lo eran. Solo se querían, no había más. Se sentían especiales con lo que tenían. Fuera lo que fuera. 
Voy a acabar el cuento, con un final feliz:
solo siguieron queriéndose, a su manera, sin saber que les deparaba el futuro, era un futuro negro, oscuro.
Solo quedaba esa forma de ser felices, como solo ellos sabían .






como duele en todos lados,
como duelen sus caricias cuando ya se ha ido.
Como me duele la ausencia,
como extraño su color de voz,
como falta su presencia en mi habitación.
Como me duele el invierno,
como me duele el verano,
como me envenena tiempo cuando tu no estas.
Como me duele estar viviendo,
como duele estar muriendo así,
como me duele hasta el alma en mi habitación;.
Como me duele no verte
como duele en madrugada
como me duele no verte
como duele en madrugada.



Me molesta mucho que todos quieran ser inolvidables, sobretodo porque 
algunos lo consiguen. También aprendí que en el amor y en la cocina, las combinaciones imposibles a veces resultan perfectas. 


-La tristeza es la única emoción que te muestra lo que realmente te importa-





¿Que hiziste en mi cabeza? no lo se, todavia no logro entender que tienes, no lo puedo explicar ahora ya entiendo que se siente cuando alguien tiene "ese no se que " 

martes, 18 de octubre de 2011

19.10.2011 ; 0:44

Encontrarse una herradura en la calle, la casualidad no existe.
Una buena señal.
Hoy me he colocado con el olor de un pañuelo que olía a esa colonia que me recuerda al paraiso.
Se me ha escapado el nombre de un pedazo de paraíso, el subconsciente es traicionero, pero nunca dice mentiras.



Me encantaría mandar besos por el cable del teléfono y abrazos en las cartas. Las mandaría a diario.
Por eso tengo el estuche lleno de papelitos con tu nombre...


Construyo castillo donde tu quieras, cuando quieras, cómo quieras,con quien quieras ...no, solo contigo.







Si sientes esa sensación de plenitud, de estar completo, de mirar a tu alrededor y sonreir, enseñar hasta la última  miga de ti, ir por la calle a cien por hora comiendote el mundo, a tu manera.




A mi me gustaría que vivamos para siempre
Y que seamos jóvenes eternamente
Qué harías si tuvieras todo el tiempo
Y no importara para nada si es verano o es invierno.
Y yo que no puedo estar sin ti
No he encontrado la manera de que no tengas que morir

 Debería existir una pastilla que hiciera olvidar el amor.
Para saber que hay dos opciones y decidir no olvidar porque yo quiero no porque no pueda.


 Estamos perdidos en un beso
Un momento en el tiempo
por siempre jóvenes.
"el mundo paró de dar vueltas".


 No es normal pensar que hacer el amor es pecado, es el mejor deporte, la mejor medicina, el mejor camino hacia la felicidad, solo si no es solo sexo.


+Voy a darte un beso sin rozarte los labios, es un truco de magia. Cierra los ojos.
-No se si fiarme... está bien.
+Bien.
-Me has rozado los labios.
+Si, algo ha salido mal ¿me dejas intentarlo de nuevo?
-Que morro tienes, no te aficiones.











Paula.






lunes, 10 de octubre de 2011

La locura de los 511.

Salir corriendo, en una gran ciudad no es fácil. Hay medios pero no hay tiempo y la ley de "causa-efecto" no funciona como debería.
Sales del colegio corriendo, con el corazón a 100 por hora, 511 solo eso te dices.
El viaje, increible: el atardecer rosa más bonito del mundo, las luces más brillantes, la silueta de las montañas como si fuera un maldito dibujo, las dos peores películas vistas con más gusto...
La última hora y media, era pensar en lo que iba a llegar y sentirme la chica más feliz del universo.

Llegué, el frío insoportable y las ganas infinitas...
Esas caras de sorpresa, eso, no podría describirlo ni en cien años, creo que nadie podría, solo digo una cosa: mereció la pena.
La noche, disfrutas, te ríes, tienes miedo, sigues disfrutando, pasas más frío, no piensas en nada, solo piensas en querer...

"Como decirte, que me has ganado poquito a poco"


Vuelves, dejas lo que quieres ahí, atrás...
Es increíble la añoranza, no sabes si volver corriendo, se te pasan miles de locuras por la cabeza, locuras que sabes que serías capaz de hacer, como la locura de quererte así.
Ante todo, mereció la pena.

                             Nada más dulce, nada tan normal como el sabor del algodón, dulce, como esa sensación...


                             Ese buen sabor de boca, que te hace volver una y cien mil veces más ...
 Y no me cansaría, por cien vidas que viviese, de levantarme por la mañana y ver este paisaje, por lo menos una vez al mes.
                                                                .ADRENALINA.

El último billete: asiento número 9. Algo de especial 
tiene que tener este número, pensé.                             
Y así fue, tan especial como si metes en una bolsita 
todas las cosas que te hacen sentir bien, la agitas    
y metes la mano, con total confianza, sabiendo que 
sea lo que sea lo que salga de ahí va a hacerte feliz.
Eso fue, todo lo que pasó. 















                                                                 Llegar a Madrid, ver la Catedral de la  Almudena ,sonreír muriéndote por dentro.
                                                             Con la cara radiante, la piel tersa, el frío del norte,
                                                                la sonrisa increible, de esas de las de verdad,
                de las que salen de donde vienen las sonrisas


       Y ahora solo pienso en no pensar, 
   en ese momento en el que me hubiera
gustado darme la vuelta, salir corriendo,
mirarte y decir: gracias, abrazarte y que 
el tiempo se pare, solo cuando esté a 511
Mientras, que pase rápido, tan rápido que 
solo vea líneas, y tener un botón rojo, por si
      quiero parar un poco, de momento... 
que el tiempo se escurra entre mis dedos.

                 "Una gata sin colmillos y una princesa de fucsia y negro"
                              Que paradójico.













Paula 511.

martes, 4 de octubre de 2011

Reflexión del 5; 0:45

Nada, que te paras a pensar en el día que hoy podía ser y te entra un escalofrío, pero es que ya te pones a imaginarte lo que te sucederá en unas horas y te caes de espaldas...
Luego dicen que no hay que vivir en el pasado, ni pensar solo en el futuro, pero qué es el presente,¿ acaso existe? Pues yo creo que no, el presente se ha pasado cuando pulso la tecla y mi cabeza lee la palabra, mientras la lee, la analiza y todo ese proceso que se realiza como si de magia se tratase en milésimas de segundo, después de eso, ya es pasado...
Duele la cabeza incluso de pensarlo. Es casi como cuando piensas en el universo, en las teorías de la creación del mundo, del ser humano, del pensamiento racional, del por qué en general de las cosas...



En realidad el ser humano nace preparado, pero va despreparándose, despegándose del mundo bonito para agarrarse al que toca, a otro en el que hay que buscar lo hermoso.
Por ejemplo: tu a un niño le preguntas el por qué de algo y te responde orgulloso... :- porque sí.
Nada, ellos no andan buscando la explicación de las cosas.


Pero nada, se ve que eso escasea en cuerpos como el mío.
Aun así, no seamos tremendistas, hoy me he dedicado a buscar 100 mentiras, creo que todos hemos mentido alguna vez, y el que diga que no, cometerá su segunda mentira posiblemente...
Lo malo es que a veces, mentimos en tonterias o transformamos la realidad, entonces no me acordaba, quizás sea porque no tengo ninguna gran mentira:
1. No me miro en los reflejos de los escaparates.
2.No me gusta el chocolate
3.Soy muy paciente
4.Soy ordenada en los días de diario.
5.Me gusta dormir con pocas almohadas.
6.Mi número favorito no es el 3 o el 35
7.No me gusta nada hacer locuras.
8.No me gusta que me miren
9.Odio ayudar a la gente.
10.Me encanta esperar el autobús.
11.Puedo salir de casa sin colonia.
12.Escucho o leo el número 511 y no me entran cosquillas en la tripa.
13.Mi mejor amigo no se llama Javier.
14.Mi madre no es una muñeca.
15.Mi instrumento favorito no es el piano.
16.No me gusta nada la moda.
17.Los tios no me gustan como a un tonto un lápiz.
18.Nunca busco el significado de mis sueños.
19.No pido deseos al reloj.
20.No acabo de contar 20 mentiras...

Reflexión: si no te sale ver lo bueno de tu vida, busca lo malo, es lo que la sociedad te enseña, pero dale la vuelta. Verás que rico.


Paula