viernes, 25 de noviembre de 2011

La "e"

Todos somos fuertes, nacemos con ello. Hay gente que nunca desarrolla ese potencial y le hace desvanecer en los momentos que más lo necesita, en los peores momentos.
Pero tú, una mujer que es como un buen perfume, guardas todo eso en un frasco pequeño. 
No me creo que alguien con la energía de un potro desbocado, tire la toalla y diga hasta aqui.
A veces me gusta verte llorar, me doy cuenta de lo que te quiero, de lo importante que eres para mi, de que me duele lo que a ti te duele y tus ojos son aun más verdes.
Estaremos aqui, ahora, en este momento.. quizá no te ayudemos a preparar biberones dentro de unos años pero ahora es el momento de apoyarse en las mejores, en las mejores amigas que hay en el mundo.
Y dejarnos de tonterias, porque tú, eres ese tipo de persona que siempre anima a los demás y por eso se me hace tan raro verte así.
Recuerda, si lloras porque no puedes ver el Sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas.
Demuestra lo que hay detrás de esos ojos verdes y ese pelo rubio alborotado, las cosas no suceden porque si. Solo hazlo, demuestra lo que tienes ahí dentro, dentro de esa cabecita llena de ideas, de frescura, de alegría, de buenas intenciones. 
Porque no conozco persona en el mundo que le pregunten :-¿Qué es lo importante en mis clases?, y responda, + Ser buenas personas.
A parte, quién va a hacer que nos tiremos cuatro días con agujetas en la tripa, con dolor de mandíbula, con dificultades para respirar.. por reirnos.
Quién va a regañarnos, a poner orden a enseñarnos a reirnos del mundo, quién si no estas tú, al 100%

 

Necesitamos que vuelvas, y vamos a volver juntas que a fin de cuentas, unos pocos fracasos en una vida llena de éxitos nunca vienen mal, piensa en positivo rubia.
Eres la "E" del grupo, pues eso, la especial, la enérgica, la emotiva, la extrema, la del edén .... 
Te quiero.

Paula.

jueves, 24 de noviembre de 2011

BóM

Nunca vuelvas a preguntarte si algo está bien o mal.
Es lo más subjetivo del mundo. Nunca te preguntes si haces bien o mal.
Solo hazlo y las consecuencias responderán por si solas. Debes preguntarte si esas consecuencias son lo suficientemente buenas para arriesgarte, para tirarte a la piscina de cabeza y dejarte de meter el dedo gordo para comprobar su temperatura.
Puede pasar, que cuando cojas carrerilla te escurras.
Pero el hecho de intentarlo, eso, te hace más valiente que cualquier cosa, más merecedor del éxito que la simple pregunta moral.
Qué es lo que está bien o lo que está mal... Depende de quién lo mire, de lo que le enseñen, desde que nace hasta que se plantea la estúpida pregunta de lo que está bien y de lo que no, cuando tiene esa capacidad, esa inteligencia, esa madurez y ese desarrollo. Eso, eso quiere decir que está preparado para decidirlo, sea lo que sea lo que haya que decidir. 
Saldrá todo bien, y el equilibrio natural del destino, y todas esas estupideces pondrán las cosas en su sitio, para hacernos quizás hoy increiblemente felices y mañana o desear no haber nacido, a odiarnos a nosotros mismos,  a odiar a otra persona, a ser felices hasta matar o miles de opciones que seguro que el estúpido de mi profesor de matemáticas sabría calcular... O respondería diciendo, infinito.
Infinitas veces, que son las que nos preguntaremos si algo está bien o mal, pero nunca tenderemos la certeza de que eso sea lo correcto ni lo que va a hacernos felices.
Aun así, seamos felices, es invierno, luego vendrá abril y lloverá, luego primavera para guardar el abrigo y luego el verano, el mejor verano, de nuevo.
Hasta entonces, no sabremos si hacemos bien o mal.
En mi casa, eructar mientras comes esta prohibido, sin embargo en la mesa helada de un esquimal o en una tribu de los mares del sur es un "gracias". Aquí con un beso a papá o a mamá, somos felices.
Siempre hay un depende.












Paula.

martes, 22 de noviembre de 2011

7 pecados

Hoy me he dado cuenta de una cosa, las peores virtudes pueden siempre camuflarse.
Los mismísimos siete pecados capitales pueden esconderse.
 - La soberbia puede ocultarse con una gran sonrisa-

 - La avaricia puede contenerse a vista de cualquiera-
 - La mujer más delgada, más esbelta y más elegante, se ha manchado alguna vez las manos de chocolate-
 - La ira, no siempre es visible, la sangre sabe subir de temperatura-

- La lujuria, quién puede resistirse a ella... siempre hay alguien que te incita a caer en la trampa-

 - Todos alguna vez hemos sentido envidia, aunque sea de los pájaros.-

- Y quién no ha sido perezoso, cuando las sábanas te atrapan como un ser superior a nosotros-

Todos hemos cometido cada uno de estos pecados y si no los cometeremos algún día, porque estamos predestinados a hacerlo, por lo que tenemos aprendido, lo que tenemos como modelo, como patrón, como referente...
El problema es que esto no se ve siempre.
La lujuria en una mujer la oculta a vista de su inocente padre un buen vestido rosa de cuello alto.
La gula la esconde la oscuridad de la noche.
La envidia la tapan las falsas alabanzas...
La pereza, es algo tan humano...
La ira se contiene, o sale con quien no tiene que salir.
La avaricia no siempre rompe el saco, a veces se esconde en un gran saco bajo la cama.
Y la soberbia, la soberbia la ocultan los que se tapan  los oidos, hacen que escuchan y en el fondo cantan una canción en su mente.



Pero en realidad, la sociedad es estúpida. Caer en los siete pecados capitales merece ser premiado, en cierto modo. Y no por el hecho de cometerlo sino por la razón de contarlo, de ser sinceros, de no hacernos los inocentes, los buenos y dejar que las cosas sucedan así, sin más.
Las princesas de los cuentos de cuando eramos pequeños eran mentirosas, descaradas, comilonas, se besaban con los hombres más hermosos de la historia.. pero las veíamos como seres perfectos magnificados.
¿Por qué? Una cara blanca, los labios sonrosados, una forma de andar suave, pisando flojo, sin hacer ruido, una sonrisa poco ruidosa, un vestido largo, unos ojitos brillantes, un pelo peinado, sin un mechón suelto, sin nada sensual, pero a la vez insinuante.
Eso era lo que hacía que los siete pecados capitales se escondieran bajo sus vestidos y todos fueramos felices y comiéramos perdices.
Pero claro, ahora las cosas son un poco diferentes. Podemos descifrar todas las historias de Disney, una a una, viendo un doble o incluso triple sentido.
Nada es lo que parece, todos somos iguales. Las piedras acaban siendo arena y la arena acaba siendo roca.
Estamos hechos de la misma materia, no hay gente dura ni blanda. Aqui el orden si altera el producto.



Paula. 

PD: si me tapo los oídos no canto canciones, solo escucho más bajo una voz que no es la mía. Paso a paso.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Un mes.



 ¿Qué harías si tuvieras todo el tiempo del mundo?
Siempre he soñado con parar el tiempo y quedarme a mis anchas en el mundo, obser todo parado y tener todo el tiempo del mundo para adelantar esas cosas que siempre tengo por hacer.
A veces la falta de tiempo nos hace hacer cosas que nos hacen ser especiales, como beber agua de la botella de la nevera sin usar un vaso, meter una camiseta arrugada en un cajón hasta que vuelves por la noche y tienes un rato para doblarla, ponerme los pendientes y la chaqueta en el ascensor, salir corriendo con la mochila abierta y cerrarla por el camino mientras corro, pegarme las hojas con los resúmenes de historia en la mampara de la ducha y estudiar mientras me enjabono, tirarle un beso a mi hermano por las mañanas desde la puerta aunque él no se de cuenta, por el hecho de cumplir...  Si tuviera ese tiempo que me falta, sería un poquito más feliz, tendría menos ojeras, comería más tranquila, tocaría entera Claro de Luna , sacaría mejores notas, querría más a mi madre, me sentaría sola en mi cuarto a pensar en mis cosas como hacía hace tiempo... Pero realmente, realmente quedaría poco de mi, de lo que soy ahora y no sería justo para el resto del mundo. No me gusta jugar con ventaja, al contrario, me gusta tener siempre algo más que hacer que los demás y cuando les veo ahogarse en un vaso de agua reirme y saborear con más gusto los éxitos, no Oscar, no es ser mala, es saber ver lo positivo de las cosas. 
Pero bueno, si pudiera parar el tiempo, lo primero que haría sería echarme una siesta de 3 horas o así, después merendaría una taza de chocolate con una tarta de manzana, luego me leería algún libro hasta que los ojos se me cansaran y me iria a pasear por ahí a observar a la gente inmovil, luego seguro que intentaría andar 511 km, luego me cansaría y me pararía en alguna tienda, luego me pondría a tocar el piano unas tres horas, luego me pondría a pensar en mis cosas en lo que tengo en lo que no tengo en lo que dejo de tener porque quiero ...
Luego me empezaría a sentir sola... me cansaría de hablar con las paredes y de mirarme en los escaparates y volvería a activar el tiempo, no se cómo.
Y volvería a lo de siempre, al estres de la capital sumado a la locura adolescente, las carreras por las mañanas, los paseos por la casa, la música de la radio, los anuncios de la tele, los problemas, la organización, la creatividad...
Todas esas cosas que como se suele decir, hacen a alguien único.








Por si sientas la cabeza.
o no...


Porque me gusta abrazar a la gente mientras duerme, arropar a quien tiene frio y las princesas, hasta que mi madre falte, van a ser algo siempre tan real como yo.




Paula.