martes, 17 de enero de 2012

Let me fall.

Nos enseñan cómo comportarnos, lo que está bien y lo que no, lo que no debemos hacer, qué es lo correcto, qué está mal visto, nos dicen incluso a quién debemos juzgar...
Pero no nos enseñan nunca cómo amar, quizás alguien te diga a quién debes amar, pero tú... tú no sabes cómo quitarte a esa persona de la cabeza y te sientes estúpida, te sientes como un personaje de una película, esa mujer fria, calculadora, dura, sin sentimientos, que solo quiere deborar hombres...
Y el caso es que las cosas son antónimas, son contrarias son lo que nunca quisiste ser y lo que no eres.
Que el concepto de ti misma cambie por unos intantes es muy duro..
No sabes cómo has llegado hasta aquí. Un amor del pasado, que está lejos, que no puedes tocar ni rozar con el filo de tus dedos, que llevas días sin soñar con él... porque tu cabeza está totalmente mentalizada y estás segura de esto y vas y te caes con todo el equipo y con el médico, el reportero y el fotógrafo deportivo. No estas lista te dices y recurres a la persona menos indicada, a la que cualquiera te diría que es un error una locura, una maldita locura. Pero lo haces y recuerdas que le quieres y se te pone ese nudo en la garganta y lloras y lloras y sigues llorando. Sales de casa con la cabeza gacha, hace frío afuera te dices y escuchas música hasta que te duele la cabeza como si fueras a desaparecer del mundo y solo quieres canciones lentas. Y vuelves a casa y pronuncias las palabras que más miedo te daba pronunciar y después sientes que está todo claro que estas lista, como diría alguien por ahí "para la vida moderna", que de ilusiones se vive y ponerle una banda sonora a esta tarde ha sido lo mejor que he podido hacer en la vida porque ahora se con certeza cómo son las cosas en realidad y me siento grande y hermosa sin maquillaje, mucho más de lo normal y me miro al espejo mientras trocitos de mar salidos de la caja que estaba escondida, guardada bajo el mar se deslizan por la piel de melocotón y van a parar a la boca de fresa de la princesa de mi papá y mamá gallina parece que respira el dolor cuando lo siento y me invita a merendar. Sin duda, una tarde para recordar 16+1 porque ha llegado el día que pensaba que iba a acabar con mis planes y resulta que un edificio en ruinas a veces inspira a un buen arquitecto.
Nadie puede cambiar lo que siente el corazón y la moral y la ética en estos casos son algo inútil, sin duda.
De todas formas no estás tú como siempre, la vida es agria a veces pero voy a ponerla sobre un plato de color blanco, que dicen que así las cosas saben más dulces y dulzura es precisamente lo que necesito porque a ti ya te tengo.


Eso es un hecho y los hechos, hechos son.



Vamos, amor muegriento, solo resiste el año.
Vierte un poco de sal, nunca estuvimos aquí.
Mi, mi, mi- mi mi mi- mi, mi
mi, mi, mi, mi...
Mirando en el fregadero de la sangre y la chapa aplastada.

Le dije a mi amor que acabara con todo.
Que cortara todas las cuerdas y me dejara caer.
Mi, mi, mi, -mi, mi, mi- mi, mi
mi, mi, mi, mi...
Justo en el momento de este decreto de altura.


Te dije que fueses paciente, te dije que fueses sutil.
Te dije que fueras equilibrado, te dije que fueses amable.
Estaré contigo al amanecer.
Pero será diferente.
Yo estaré sosteniendo todos los tickets. Y tú tendrás todas las multas.

Ven, amor consumido,
¿qué pasó aquí?
Mama en la esperanza en este sostén.
Mi, mi, mi- mi, mi, mi- mi, mi
mi, mi, mi...
El resentimiento está lleno de carga y es tan lenta la ruptura.

Te dije que fueses paciente, te dije que fueses sutil.
Te dije que fueras equilibrado, te dije que fueses amable.
Ahora todo tu amor se ha malgastado, ¿y quién demonios era yo por aquél entonces?
Porque ahora estoy rasgando todos los pantalones,
y, al final, todo tu destino.

¿Quién te amará? ¿Quién luchará?
¿Y quién caerá, lejos, atrás?

Ven aquí, amor consumido...
mi, mi, mi- mi, mi, mi- mi, mi
mi, mi, mi...


 
PD: Hay que verse de rodillas para poderse levantar.




Paula.

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